Distracción, fascinación, avidez de entretenimiento...

Nunca me molesto, en algún sentido de doler, lo que digan los demás. Que yo me acuerde, desde que tengo blog hasta el día de hoy, las opiniones de los demás no me importaron. Y no es que anduve revisando mi blog, pero para algo sirve escribir las cosas, y es que sentimientos a veces quedan en la nada, y termina afectándote el triple después  si lo dejas pasar. Tanto un blog, personas, recuerdos, son muy importante.

Si ya se, medio delirio comparar un blog con una persona, pero nunca fui a eso. Pero si, derrepente llego a afectarme, y fue en la cosa que menos creía. Pensé muchísimas cosas, nunca fui de dar explicaciones sobre a nadie, pero este tiempo me pareció que hasta yo me lo merecía.

Odio profundamente hablar de otras personas, no me interesa, y menos si no es de mi onda, pero cuando se trata de alguien que si me importa, me jode bastante explicar lo que sea. Llegue a enojarme con el mundo. Y esta vez me di cuenta, no fue como el año pasado. Me di cuenta y veía esas cosas, hoy sigue todo exactamente igual. Pero no tengo presión de nada. Hablarlo con alguien era lo que me faltaba, por mas mínimo y sencillo que sea, era hablarlo, capas fue la persona, pero eso faltaba.

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